Tríptico compuesto por tres paneles de grandes dimensiones que representan alegorías de la danza, la tragedia y la música, originales de teatro en Montpelier. Cada figura femenina está representada en una postura clásica, rodeada de un marco arquitectónico decorado con motivos florales, resaltando la elegancia y teatralidad del arte académico de finales del siglo XIX. Las piezas muestran un delicado tratamiento de la figura humana y los pliegues de las vestimentas, evocando una atmósfera de nobleza y solemnidad típica de la época.